Caminando con Mama

Bajo este enfermo sol de verano, sudando, respirando hondo, caminando, veo cosas que me hacen recordar mi dulce pasado.

Una sola imagen se queda impregnada en mi mente durante mucho tiempo, Luisito pasa de la mano con su mami tan gordita, tan linda como siempre, por que las mamis gorditas son las mas lindas del mundo, mamis como la mia.

Ver a Luisito de unos 11 años me hizo pensar tanto en mi linda mami, que me puso melancolico. Yo y mi madre eramos dos amigos inseparables, aunque nunca nos deciamos "Te quiero", solo lo demostrabamos. Mama era la mas dulce de todas las madres que pude haber conocido. Como la mayoria de madres criada a la antigua, muy antigua diria yo porque mi abuelo que en paz descance tenia una diciplina inquebrantable, un hombre que se tomaba en serio eso de "La letra con sangre entra", aunque el era analfabeto.

Mama temia que fueramos ese tipo de gente que a mi tampoco me gusta, nos crio con una paciencia increible aunque a veces explotaba. Ahora que pienso mejor que antes, pienso y daria lo que fuera por redimir los errores. Cuando mama me golpeaba yo la odiaba creyendo estupidamente que me odiaba ella tambien. Cuando alguna vez le pegue a mi hermano menor por que hizo algo que no me gustaba y crei correcto golpearle, inmediatamente despues senti eso que debio sentir mi querida madre al golpearme, ese sentimiento de extrema culpa, ese sentimiento de haberse golpeado uno mismo, ese autoodio.

Cuando saliamos los dos, uno al lado de otro, como dos amigos inseparables, ibamos a cualquier sitio no importaba donde con tal de pasar un buen rato, ibamos a cuanta fiesta surgia, ibamos a todos lados. Cuando caminabamos me sentia tan agusto. Hubiese preferido pasar mil horas caminando con mi madre en vez de estar vivo ahora aqui sentado recordandola.

Si vieran la foto de mi mama, notarian que se parece mucho a mi, o mejor dicho yo a ella. Un dia caminando por ahi me puse a pensar que diria si le digo "Ma, te quiero" y luego la abrazara, entonces tome valor, si valor por que no era algun acontecimiento comun, y me puse cerca de ella y balbuseando se lo dije y abrace su brazo, como diciendole lo que en realidad queria decirle "Ma, nunca me dejes caminar solo, por favor".

De 11 años yo era un niño que pensaba que el mundo giraba en torno a mi madre y yo. Caminando con un par de locos a veces de la mano, a veces conversando. Nunca sospeche ni por un instante lo que vendria a continuacion. Mi infancia termino un Sabado 8 de Setiembre del 2000 por la mañana. Es horrible recordar ese momento que ningun niño tiene derecho a vivir, ninguno menos mi hermano menor, por eso lo quiero tanto.